Binvenido

Aquí encontraras poesías,imágenes,y alguna que otra idea loca emanada desde el sur, más exactamente desde Montevideo, Uruguay.

jueves, 4 de octubre de 2007

Este niño esta triste
como la aurora
y no hay magia que pueda
contra la “mora”.
Y si ves como siente,
como ríe , como llora
tiene mil duendes tristes
sus ojos negros.
Que vivimos un siglo de boludeces
y queremos ganarnos el cielo
mientras ellos mueren.
¡Que me aparte y entierre
esta conciencia
por los niños de mi tierra
y tantas vergüenzas!
El vientre de la tierra
los esta llamando
y no le alcanzan sus huesos para saciarse.
En medio de este día
ya no hay tibieza
y siento mis manos culpables
de tanta miseria.
Quisiera cambiar la canción,
el verso por pan,
que fuese seno tibio de madre
cada poema.
Quiero un tiempo de cambio
para mi gente,
pero las hadas fallecen
de tanta hambre
y se van quedando dormidos
los duendes en esos ojos.



2 comentarios:

Marta Uma Blanco dijo...

Hermosos versos para describir una realidad terrible que nos conmueve profundamente. Como mujer me pregunto, ¿estará el futuro del planeta en manos de las madres? ¿Alzarán por fin sus voces sabias instaurando la cordura?
Un abrazo, poeta
MArta Uma

Anónimo dijo...

Como tres árboles, un brillo en el centro, hace recordar al calvario, la pena y la paz, el mensaje y una esperanza, eso es la sombra reflejada, esa que deja su voz callada que grita en silencio, que reclama justicia, que embite el lienzo que ha disimulado lo que miles de años no ha podido mejorar. La noche oscura de esta humanidad sin piedad que se esconde detrás de una valiente cobardía, complot de uñas, sibileo detrás de columnas, que juegan sus montones, de zombíes que creen que viven porque caminan, como duendes de un engaño. Y tu poesía, tus letras, tu trance, tu poder interno, se descuelga detrás de una inspiración tremebunda, peritanfláutica, inexcrutable, desafiante... que a veces le deja a uno con el sabor de querer más de tí, más de tu prosa, más de tus versos, más y más... quiero más....
Mis felicitaciones, que será como un granito de arena entre un mar inmenso de montañas, porque no puede nadie conocerte sin amarte, sintiendo el hechizo de tu mente que atrapa y devora los anhelos para esculpirlos en modelos literarios.
Que el Dios de tu Corazón te concenda todas esas cosas que deseas desde el más acá hasta el más allá y continíes, estés donde estés alimentando el hambre de los seres que te aman.

VALS